El gol perdido

Durante el fin de semana, Cuchu Cambiasso hizo un gol para el Inter, el Tecla Farías convirtió dos para el Porto y otros futbolistas argentinos que juegan en el exterior también festejaron. Pero el único compatriota que anotó tres goles fue Raúl Bobadilla, el chico que comenzó a jugar en las inferiores de Defe, después pasó a River y más tarde se fue a Suiza. Ahora juega en el Grasshoppers, uno de los grandes de ese país, y el sábado anotó tres goles (todos en el primer tiempo) contra el Young Boys, que marcha segundo en el campeonato. La foto es justamente del partido del sábado. Que un chico que haya salido de nuestro club haga tres goles en Europa, mientras nosotros tardamos más de 500 minutos para festejar uno, es toda una paradoja (o una maldición, según se vea). Para saber más de la historia de este chico (porque hay aristas en su transferencia que todos los defensoristas deberían saber), aquí se linkean tres informes que Román publicó en la madre de todas las páginas dragonas, www.defe.com.ar. Mientras nosotros sufrimos, Bobadilla es el gol perdido.
http://www.defe.com.ar/nota/2007/12/18/711.html
http://www.defe.com.ar/nota/2007/12/15/709.html
http://www.defe.com.ar/nota/2007/09/17/618.html