Historia triunfal en las finales

Y llegó el día, nomás: el día de la primera final del Octogonal, contra Deportivo Merlo. Y repasemos, entonces, las finales de Defe en la historia. La más recordada, claro, fue la última, aquella del 2001, contra Temperley: 0-0 en la ida (aunque la AFA nos lo dio por ganado 1-0 por la agresión a Casco Rodríguez en el entretiempo, tras lo cual no se terminó de jugar el partido) y 2-0 en la revancha, en Ferro. Fue el ascenso a la B Nacional, y también una revancha por la derrota en 1999 contra el mismo rival: 1-2 en Banfield, en la ida, y 0-0 en Platense, en la vuelta, en aquel partido en el que el japonés erró un gol imposible en el descuento. Con ese gol, subíamos nosotros. Más atrás en el tiempo, llega el recuerdo no de una final, pero sí de una semifinal inolvidable: en 1984, contra Gimnasia La Plata, fue 2-2 en el Monumental y 0-1 en el Bosque. Siempre se dijo que el equipo que ganaba ese partido ascendería a la A, ya que era mucho más que Racing (de hecho, el Lobo venció muy fácil a la Academia en la instancia siguiente, 3-1 en Avellaneda y 4-2 en La Plata).
Para encontrar la final anterior, hay que ir hasta 1967, cuando le ganamos a Tigre 2-0 en la vieja cancha de Platense. Fue el partido de los recordados goles de Fumagalli y Tomino: lástima que, pese a que en ese partido nos consagramos campeones de la B, no nos alcanzó para ascender a la A.
Aún más atrás en el tiempo, en 1953 nos encontramos con la final del torneo Preparación, que antecedía al torneo Campeonato. Y Defe (que había sido ganador de la Zona A) se quedó con aquel torneo Preparación al empatar 2-2 con Argentino de Rosario (que era el ganador del Grupo B) en la final, ya que teníamos ventaja deportiva por gol average. Aquel éxito fue el prólogo al título que Defe también consiguió aquel año en el torneo Campeonato, que sirvió para ser campeón y ascender a la B.
Y finalmente, las dos primeras finales fueron las de 1914, cuando Defe ascendió a la Primera División. Y decimos "primeras finales" y no "primera final" porque fueron dos: primero ante Lanús, para desempatar al ganador de la zona A. Al Granate le ganamos 3-0 con dos goles del gran Pasquale y luego, ya contra Vélez (el ganador de la zona B), volvimos a ganar, esta vez 3-2, con un gol definitorio de Caldas, el mejor jugador de la historia de Defe.
Esto quiere decir que, de seis finales, ganamos 5 (las dos de 1914, la de 1953, la de 1967 y la de 2001) y sólo perdimos una, la de 1999. Un buen antecedente para los partidos que jugaremos contra Merlo, hoy y el próximo sábado.