Agronomía (de nuestros enviados especiales)

San Telmo 1-Defensores 1
-¿A cuánto está la platea, amigo?, -preguntó Defelandia, mirando de reojo a los pibes de Telmo, medio en voz baja, para no despertar sospechas.
-30 pesitos, -respondió el boletero de la cancha de Comu, pucho en mano.
-Ay, -se quejó mi bolsillo.
Entradas en mano, los enviados especiales de Defelandia (tres peridiodistas, dos fotógrafos y uno al pedo) entraron a la mini platea de Comu. De repente, estalla la primera polémica en la platea: ¿Llueve o no llueve? "Para mí, sí", tiró uno, creyéndose el Confesore. "Yo me traje el paraguas azul y celeste, ja ja", dijo otro, creyéndose el gracioso. Nadie se lo festejó, pero miró a Defelandia y hubo que hacer una sonrisita de ocasión.
"Ese de gorrita es el jefe de la hinchada de Telmo. Está forrado en guita", nos tira nuestro contacto candombero. "¿Sabés cómo recolecta? Cuando van Gastán Pauls, Andy Kutznezoff y todos esos que hacen programas 'progres', tienen que pactar con él. El otro día cambió la camioneta, ja", agrega la fuente. Dan ganas de mirarlo de otra manera.
Empieza el partido y Minadevino está que estalla. Si hubiera un emisario del Chelsea, se lo llevaban. Claro, eso duró cinco minutos. Defe toca: el que anda bien en serio es Friendrich (o Friedrich, pero dan ganas de compararlo con el tipo que se robó como diez palos del banco en Santa Fe, ¿se acuerdan?). Recupera y va al frente como un Tanque. Gran partido.
Pero el que no anda bien es Montagnoli (ojo, al pibe hay que bancarlo porque es de las inferiores, eh). Por ahí, y con Villalba sacando palco vip para ver la jugada de cerca, llega el gol de Sever. Ese Sever es demasiado para Telmo (para este Telmo, quiero decir). Juega bien de verdad.
Con un par de dragones infiltrados en la platea, nos miramos con ganas de hacernos el harakiri. "Que cagada", "que injusto", "llegaron una vez y nos embocaron". Todo en voz baja, para no ser delatados. Los de San Telmo, igual, están en otra: "Che, la AFA nos cagó: este mes nos dieron 30 lucas de la tele, y el mes pasado nos habían dado 37". De las cosas que uno se entera, en fin. Parece que el presupuesto de Telmo anda por las 90 lucas por mes. Puf.
En el segundo tiempo sale el Milan. En los primeros cinco minutos, tres situaciones clarísimas de gol (en el primer tiempo había habido una de Parodi en el palo). Pero Cipriani no define como Kaká sino como el 9 de Douglas Haig (o Patronato, o Trinidad de San Juan, o cualquier otro equipo con camiseta roja y negra). Esto es muy injusto, tan injusto como la moratoria que acaba de sacar el Gobierno. Hasta que sí, al fin, Zanello se sube a la moto y pone el 1-1.
De ahi hasta el final, pasó de todo: Sanzotti tapó un par tremendas (confieso que soy un cobarde y no quise mirar) y Zanello tuvo una tan pero tan clara que, por tener dos segundos al pedo, la tiró lejos. Si hubiera estado más apurado, habría cerrado los ojos, tirar al bulto y seguro que era el 2-1.
Podríamos haber ganado. Pudimos haber perdido. Para Defelandia, después de un simposio que duró entre una hora y dos horas, concluimos que el equipo jugó un buen partido. Pero como jugamos ante el anteúltimo, diremos que jugó un partido aceptable.
Por últimos, les tiramos un nombre: Maxi Ceratto. Jugó los últimos 10 minutos, pero puso unos huevos tremendos. Los dejo: mi esposa me está putenado porque se enfría la cena. ¿Quién se piensa que manda en esta casa?