La sinfónica del Bajo Núñez

Defensores 3-Español 0
Este equipo está para el Colón: hoy jugó como una orquesta. Hacía mucho tiempo que no teníamos un equipo con tanto toque. Y no sólo toque: también huevos. Cómo raspan Arce, Mansilla y todos los defensores. Y cómo juegan Sommariva y Lucho González. Y como marcan los defensores: unas bestias. Y bien también el arquero: tapó un par difíciles. Y qué decir del Tanque: es nuestro sumo pontífice. Y qué decir del recambio: no estaba Montenegro, expulsado, y jugó Coria. Pero Coria se lesionó, y entró Fernando Cobián. Parecía un ardillita, bajito, casi una pulga. La rompió. No vamos a decir que es la reencarnación de Ceratto. Pero la rompió: en otros momentos, sería titular y capitán. Hoy es nuestro cuarto delantero: ni siquiera tiene lugar en el banco de suplentes. Fue una paliza a Español, una revancha por aquel 3-0 de 1984. No quiero hacer futurología: falta muchísimo y recordemos cómo se pincharon Sarmiento, San Martín de San Juan y otros equipos que puntearon casi toda la temporada pasada en el Ascenso. Hoy quedamos únicos líderes, pero insisto, faltan 300 finales. Prefiero quedarme con el presente: cantar la canción más linda del mundo, el mítico "Oohhh vamos Defensores, juegue al fútbol, haga goles". Eso es lo que genera la sinfónica del Bajo Núñez.